entre la luz y las tinieblas

calles con gente apresurada
edificios con luz
con mucha gente dentro
pero nada de sentimiento
nada de felicidad

caras que reflejan cansancio
cuerpos malditos
ojos llorosos
humo que me mata día tras día

a pesar de mi caminata apresurada
la vida pasa lentamente enfrente de mí
puedo distinguir cada sentimiento
de la gente que va en su auto
de las chicas que caminan cuchicheando
del empleado que siente desesperación
por estar solo
por la lluvia que cae
porque en su vida nada se resuelve
porque Boca empató el clásico
porque nadie le llama
y nadie se toma la molestia de preguntar
como va su vida

en realidad si hay gente que hace eso por él
son pocas
son significativas
pero a cada paso que uno da
se siente el estómago viniendo desde el centro
hasta el orificio de la boca
en una extraña agitación
que ni siquiera la mente más distraída
consigue evitar

entretanto
consigo llegar a un lugar olvidado
con luces pero sin vida
con gente pero sin alma
con ruido pero sin esencia
allí es donde pertenezco
a donde nadie voltea a verme
donde nadie se ocupa de mì
donde nadie llorará cuando muera