MIS CÍRCULOS SIN CUADRATURA

no encuentro los fantasmas
que solía tener alrededor
no disfruto la adrenalina del terror
fluir a través de mi cuerpo

lo que sí tengo en demasía
es el recuerdo de tu cabello ondulandose
a merced del viento inhóspito de la madrugada
y tus manos cubriéndose la cara
que suplicaba piedad a la naturaleza

los líquidos de mi cuerpo
no encuentran vías libres para circular
se estancan en cualquier lado
atrasando mi proceso evolutivo

así pues
me encuentro a mí mismo
tirado en la arena
con juguetes de cuerda
y paletas de caramelo en la boca
no quise crecer
el niño que habita en mí nunca maduró

me veo perdido en un laberinto
de casas que se derrumban a mi paso
los perros huelen mi presencia y me ladran
y el horizonte rojo
escupe sangre cósmica que convierte mi éxtasis
en lenta agonía de muerte

y mi cuerpo que no descansa
yace perdido en una plancha de piedra
como muerto en vida
perdido en la morgue infernal de la infinita pesadilla

es el mismo cuerpo que vaga por calles oscuras
y suelos terregosos
huyendo de la oscuridad y en pos de una ilusión efímera
de vestido blanco y alas de guerra

el que encuentra en la quietud de la noche
una de sus mejores aliadas
y al mismo tiempo
un enigma que se responde a sí mismo
cayendo del abismo y agitando aguas interiores

se regocija en su dolor
sin más ataduras que su tierna mirada
que busca una dominatriz en cada cuerpo femenino
y que muerto de miedo
suplica una y otra vez
que los golpes se terminen
aún antes de empezar

no me sirven las máscaras
ni los labios que se pinta artificialmente
para regocijo de mis sentidos
busco la impagable mirada
que me siga a través del camino
y que sorprendiéndose por mis lágrimas
me consuele con abrazos eternos